9 de agosto de 2010

Detrás de un reto: mi propia empresa...

No tengo claro si es una buena o mala idea, pero al menos es una opción...

Como en todo lado, un empleo estable es una meta que solo un puñado puede alcanzar... Los desafortunados que no lo conseguimos debemos seguir aferrándonos "a lo que haya", hasta ver si en una nueva oportunidad podremos ser los escogidos...

Por esto he decidido empezar un reto difícil y complicado: empezar una empresa propia... Y si, es un reto, porque todo el mundo sabe que es mucho más fácil ser el empleado que ser el empleador... El empleado tiene que preocuparse por su trabajo, por el dinero que recibirá a fin de mes que le permita solventar sus gastos y los de su familia... El empleador, en cambio, tiene que preocuparse por el trabajo de todos y por conseguir más, pues de ello depende que cada mes exista el trabajo suficiente para solventar los gastos de todos sus empleados y sus familias...

Aunque suene a cliché, se que no es algo fácil... No son muchos los que lo intentan, pero son aún menos los que lo logran, y mucho menos los que consiguen hacerla crecer... Y ahí la gran pregunta: ¿¿a cuál de estos niveles podría llegar??...

Empiezo mi reto... De aquí en adelante dependo de mi mismo...