Tengo que decirlo (aunque ni yo mismo me lo creo): Ando perdiéndole el miedo al compromiso...
(Shhhhhh... ¡¡¡Aún es secreto de estado!!!...)
No hablo solo de relaciones de pareja... Hablo también de relaciones laborales y proyecciones económicas... Hablo del compromiso con todo y con todos los que afectan mi vida de una u otra forma... Hablo de dejar de lado al niño, y empezar por ver las cosas desde otra perspectiva...
Verán... El proyecto va saliendo de a poco, y mi compromiso con él se mantiene tal como el día que empecé: intacto... PERO (jeje... siempre hay un pero), ese compromiso se pondrá sobre la mesa en un poco más de un mes: si llegamos a un acuerdo económico, me quedo... De lo contrario...
Además, el compromiso no solo depende del aspecto económico, sino de algo mucho más importante: MI PRESTIGIO PROFESIONAL... Si por algo me he caracterizado siempre (y lo digo con todo orgullo, aunque piensen que no soy nada modesto) es en hacer bien las cosas... Es decir, como deben ser hechas... (Fíjense que ni un error ortográfico me permito... ni siquiera en un SMS!!!) Claro, a veces eso me ha traído problemas, pero esta vez he encontrado una gran cantidad de criterios equivocados (técnicos y constructivos) que ponen en riesgo mi prestigio profesional...
No me permitiré arriesgarlo así por así...
Por otro lado, también le voy perdiendo el miedo al compromiso de pareja... No es ningún secreto que casi siempre he encontrado alguien con quien compartir una relación sentimental en cada proyecto en el que he andado alrededor de mi país (no me digan picaflor ni que tengo un amor en cada puerto... Prefiero pensar que siempre encontré una persona especial con quien compartir un pedacito de mi corazón... y quien compartió tambien un pedacito del suyo)... Y esta vez, tampoco ha sido la excepción...
Digamos que en medio de esta crisis diplomática entre Ecuador y Colombia yo voy poniendo mi granito de arena para mantener las buenas relaciones (me estoy enamorando de una colombiana... Jeje...) Lo bueno: siempre me recibe con un café con aroma de mujer (¡¡¡Colombiana!!!)... Lo malo: pueden empezar las habladurías y a mezclarnos en problemas laborales...
En fin... Le saldremos al paso a lo que se venga!!...
No creo que sea amor para toda la vida (¿¿es posible enamorarse de alguien en una semana??) pero ya no me importa en que todos lo sepan... Al fin y al cabo, soy libre como el viento, y no tengo por qué rendirle cuentas a nadie de lo que hago o dejo de hacer...
(¿¿Creen en el amor a primera vista??... Yo sí, porque lo descubrí hace unos años en un rinconcito olvidado de mi querido país... Y estoy seguro que solo "ella" podría ponerme a revalorizar mis decisiones ahora... Por suerte (¿?), creo que ya me ha olvidado...)
¿¿Debo dejar de ser ese "niño bueno" que todos conocemos??...
(Shhhhhh... ¡¡¡Aún es secreto de estado!!!...)
No hablo solo de relaciones de pareja... Hablo también de relaciones laborales y proyecciones económicas... Hablo del compromiso con todo y con todos los que afectan mi vida de una u otra forma... Hablo de dejar de lado al niño, y empezar por ver las cosas desde otra perspectiva...
Verán... El proyecto va saliendo de a poco, y mi compromiso con él se mantiene tal como el día que empecé: intacto... PERO (jeje... siempre hay un pero), ese compromiso se pondrá sobre la mesa en un poco más de un mes: si llegamos a un acuerdo económico, me quedo... De lo contrario...
Además, el compromiso no solo depende del aspecto económico, sino de algo mucho más importante: MI PRESTIGIO PROFESIONAL... Si por algo me he caracterizado siempre (y lo digo con todo orgullo, aunque piensen que no soy nada modesto) es en hacer bien las cosas... Es decir, como deben ser hechas... (Fíjense que ni un error ortográfico me permito... ni siquiera en un SMS!!!) Claro, a veces eso me ha traído problemas, pero esta vez he encontrado una gran cantidad de criterios equivocados (técnicos y constructivos) que ponen en riesgo mi prestigio profesional...
No me permitiré arriesgarlo así por así...
Por otro lado, también le voy perdiendo el miedo al compromiso de pareja... No es ningún secreto que casi siempre he encontrado alguien con quien compartir una relación sentimental en cada proyecto en el que he andado alrededor de mi país (no me digan picaflor ni que tengo un amor en cada puerto... Prefiero pensar que siempre encontré una persona especial con quien compartir un pedacito de mi corazón... y quien compartió tambien un pedacito del suyo)... Y esta vez, tampoco ha sido la excepción...
Digamos que en medio de esta crisis diplomática entre Ecuador y Colombia yo voy poniendo mi granito de arena para mantener las buenas relaciones (me estoy enamorando de una colombiana... Jeje...) Lo bueno: siempre me recibe con un café con aroma de mujer (¡¡¡Colombiana!!!)... Lo malo: pueden empezar las habladurías y a mezclarnos en problemas laborales...
En fin... Le saldremos al paso a lo que se venga!!...
No creo que sea amor para toda la vida (¿¿es posible enamorarse de alguien en una semana??) pero ya no me importa en que todos lo sepan... Al fin y al cabo, soy libre como el viento, y no tengo por qué rendirle cuentas a nadie de lo que hago o dejo de hacer...
(¿¿Creen en el amor a primera vista??... Yo sí, porque lo descubrí hace unos años en un rinconcito olvidado de mi querido país... Y estoy seguro que solo "ella" podría ponerme a revalorizar mis decisiones ahora... Por suerte (¿?), creo que ya me ha olvidado...)
¿¿Debo dejar de ser ese "niño bueno" que todos conocemos??...